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from the American Academy of Orthopaedic Surgeons

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Dedo en gatillo (Trigger Finger)

El dedo en gatillo es una afección que causa dolor, rigidez y la sensación de que el dedo se traba o atasca cuando lo flexiona o lo estira. La afección también se conoce como “tenosinovitis estenosante.” En la mayoría de los casos, los dedos afectados por el dedo en gatillo son el anular y el pulgar, pero se puede presentar en los otros dedos también. Cuando el pulgar es el dedo lesionado, la afección se llama “pulgar en gatillo.”

Anatomía

Los tendones flexores son estructuras similares a un cordón que unen los músculos del antebrazo con los huesos de los dedos. Cuando los músculos se contraen, los tendones flexores permiten que se flexionen los dedos.

Cada uno de los tendones flexores pasa a través de un túnel en la palma y en los dedos, lo que le permite deslizarse sin problemas a medida que se flexiona y estira el dedo. Este túnel se llama “vaina del tendón.”

A lo largo de la vaina del tendón, bandas de tejido llamadas “poleas” sostienen los tendones flexores cerca de los huesos de los dedos. Los tendones pasan a través de las poleas a medida que se mueve el dedo. La polea en la base del dedo se llama “polea A1.” En la mayoría de los casos, esta es la polea afectada en el dedo en gatillo.

La vaina del tendón se une a los huesos de los dedos y mantiene en su lugar al tendón flexor a medida que se mueve. La polea A1 se encuentra cerca de la abertura de la vaina del tendón.
Reproducido y adaptado de JF Sarwark, ed.: Essentials of Musculoskeletal Care, ed 4. Rosemont, IL, American Academy of Orthopaedic Surgeons, 2010.

Descripción

En un paciente que tiene dedo en gatillo, la polea A1 se inflama o engrosa, lo que dificulta que el tendón flexor se deslice a través de ella cuando se flexiona el dedo. Con el transcurso del tiempo, el tendón flexor también se puede inflamar y puede formarse un pequeño nódulo en la superficie. Cuando se flexiona el dedo y el nódulo pasa a través de la polea, hay una sensación de que el dedo se atasca o hace un chasquido. A menudo, esto es doloroso.

El nódulo engrosado en el tendón flexor choca contra la polea A1, lo que dificulta estirar el dedo.

Reproducido y adaptado de JF Sarwark, ed.: Essentials of Musculoskeletal Care, ed 4. Rosemont, IL, American Academy of Orthopaedic Surgeons, 2010.

En un caso grave de dedo en gatillo, el dedo se traba y atora en la posición flexionada. A veces, el paciente debe usar la otra mano para estirar el dedo.

Este video de pulgar en gatillo y dedo en gatillo muestra con claridad cómo se atasca el tendón en la polea A1.

Causa

Si bien no se conocen muy bien las causas del dedo en gatillo, diversos factores pueden aumentar el riesgo de padecer la afección. Estos incluyen lo siguiente:

  • Afecciones médicas. El dedo en gatillo es más frecuente en personas con determinadas afecciones médicas, como la diabetes y la artritis reumatoide.
  • Actividades enérgicas que emplean la mano. Se sabe que la afección se presenta después del uso enérgico de los dedos y los pulgares.

Síntomas

A menudo, los síntomas del dedo en gatillo comienzan con una lesión simple. Pueden presentarse después de un período de uso intensivo de la mano, en particular, después de actividades que impliquen pellizcar y sujetar.

El dedo en gatillo de este paciente está trabado en la posición flexionada. 

Los síntomas pueden incluir lo siguiente:

  • bulto blando en la base del dedo, sobre la palma de la mano;
  • sensación de que el dedo se atasca, hace un chasquido o se traba con el movimiento;
  • dolor cuando flexiona o estira el dedo.

La rigidez y el atascamiento tienden a empeorar después de períodos de inactividad, como cuando se levanta por la mañana. 

En un caso grave, el dedo afectado se puede trabajar en la posición flexionada.

Examen del médico

El médico podrá diagnosticarle dedo en gatillo al hablar con usted acerca de los síntomas y al examinarle la mano. En general, no se requiere hacer radiografías ni otras pruebas.

Durante el examen, el médico buscará alguno de los siguientes síntomas:

  • sensibilidad sobre la vaina del tendón flexor en la palma de la mano;
  • engrosamiento o inflamación de la vaina del tendón;
  • el dedo queda en la posición de apretar un gatillo cuando lo flexiona y lo estira.

Durante el examen, el médico revisará si el dedo presenta rigidez y signos de atascamiento.

Reproducido de JF Sarwark, ed.: Essentials of Musculoskeletal Care, ed 4. Rosemont, IL, American Academy of Orthopaedic Surgeons, 2010.

Tratamiento

Tratamiento sin cirugía

Por lo general, el tratamiento inicial para el dedo en gatillo es sin cirugía.

Descanso. Dejar descansar la mano y evitar las actividades que empeoran la afección puede ser suficiente para resolver el problema.

Ferulización. Puede ser útil usar una férula durante la noche para mantener el dedo o el pulgar afectado en una posición recta mientras duerme.

Ejercicios. Los ejercicios suaves de estiramiento pueden ayudar a disminuir la rigidez y mejorar el rango de movimiento en el dedo afectado.

Medicamentos. Los medicamentos de venta libre, como el paracetamol y los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), pueden ayudar a aliviar el dolor y la inflamación.

Inyecciones de esteroides. El corticoesteroide (como la cortisona) es un agente antiinflamatorio que se puede inyectar en la vaina del tendón, en la base del dedo en gatillo. Una inyección de esteroides puede evitar que el dedo quede en la posición de apretar un gatillo durante un período que puede ser de un día o de varias semanas. Si los síntomas no mejoran con el transcurso del tiempo, se puede aplicar una segunda inyección. Si dos inyecciones no resuelven el problema, se puede considerar realizar una cirugía. 

Las inyecciones de esteroides tienen menos probabilidades de ser efectivas en pacientes con diabetes, pero pueden ayudar a evitar la cirugía. Pueden causar un aumento a corto plazo del azúcar en sangre. Por lo tanto, después de la inyección, se deben controlar los niveles de glucosa en pacientes diabéticos.

La fotografía y la ilustración muestran una inyección de esteroides en la polea A1.

Reproducido de JF Sarwark, ed.: Essentials of Musculoskeletal Care, ed 4. Rosemont, IL, American Academy of Orthopaedic Surgeons, 2010.

Tratamiento con cirugía

Si el dedo no mejora con el tratamiento no quirúrgico, tal vez desee considerar la cirugía. La cirugía es optativa. La decisión de realizar la cirugía se basa en la intensidad del dolor o la pérdida de función que tiene en el dedo. Sin embargo, si el dedo o el pulgar están atorados en la posición doblada o flexionada, el médico puede recomendar la cirugía para evitar la rigidez permanente.

Procedimiento quirúrgico. El procedimiento quirúrgico para el dedo en gatillo se llama “tenolisis” o “liberación del dedo en gatillo.”

El objetivo del procedimiento es liberar la polea A1 que bloquea el movimiento del tendón, para que el tendón flexor pueda deslizarse con más facilidad a través de la vaina del tendón. En general, el procedimiento se realiza de manera ambulatoria con una inyección de anestesia local para adormecer la zona de la cirugía.

La cirugía se realiza a través de una pequeña incisión abierta en la palma o con la punta de una aguja. La polea A1 se divide (libera) para que el tendón flexor puede deslizarse con libertad. Aunque las poleas tienen una función importante en la mano, la liberación de la polea A1 no debería causar problemas en el futuro.

Durante la cirugía de liberación del dedo en gatillo, se corta la polea A1 (línea de puntos azul).

Reproducido y adaptado de JF Sarwark, ed.: Essentials of Musculoskeletal Care, ed 4. Rosemont, IL, American Academy of Orthopaedic Surgeons, 2010.

Complicaciones. Cualquier tipo de cirugía puede presentar complicaciones. El médico le informará los riesgos antes de la cirugía y tomará medidas específicas para ayudar a prevenir las complicaciones.

Las complicaciones más comunes después de la cirugía del dedo en gatillo o el pulgar en gatillo incluyen las siguientes:

  • rigidez en el dedo afectado;
  • incapacidad para estirar el dedo afectado. Si no podía estirar el dedo por completo antes de la cirugía, tal vez no pueda hacerlo después de ella.
  • dolor o inflamación temporales en el lugar de la cirugía.

Las complicaciones menos comunes incluyen las siguientes:

  • bloqueo o chasquido persistentes. Esto puede indicar que se debe liberar más polea o puede estar causado por otro problema en el dedo;
  • “pandeo de cuerda de arco.” En pocos casos, el tendón se “pandea” alejándose del hueso, lo que da como resultado un rango reducido del movimiento. El pandeo de cuerda de arco se presenta cuando se libera una de las poleas más importantes;
  • infección (poco común);
  • lesión del nervio digital. Esto puede causar entumecimiento o cosquilleo a lo largo de una parte del dedo.

Recuperación. La recomendación para la mayoría de los pacientes es que muevan el dedo inmediatamente después de la cirugía.

Es común tener dolor en la palma. Elevar la mano sobre la altura del corazón puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación.

Aunque la incisión sanará después de unas pocas semanas, la inflamación y la rigidez en la mano y los dedos o en el dedo pulgar pueden demorar de 4 a 6 meses en aliviarse por completo.

Si la rigidez, la inflamación o el dolor continúan después de la cirugía, el médico puede recomendarle consultar a un terapeuta especializado en manos.

Resultado. Los pacientes a los que se les realizó la cirugía experimentan una mejora significativa de la función, así como un alivio del dolor del dedo en gatillo. Aun así, si antes de la cirugía había una contractura o una pérdida del movimiento, tal vez no se recupere el rango completo de movimiento.

Last Reviewed

agosto 2019

Contributed and/or Updated by

Fraser J. Leversedge, MD, FAAOSRachel S. Rohde, MD, FAAOS

Peer-Reviewed by

Ramon L. Jimenez, MD, FAAOSStuart J. Fischer, MD, FAAOS

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